A FUEGO LENTO
Título: ''A prueba de fuego''
En A Slow Fire Burning, la autora vuelve a emplear los temas y tropos que hicieron que sus novelas anteriores sobresalieran de la mayoría de las obras del género. Una vez más, el lector se encuentra con un grupo de mujeres con problemas cuyas vidas se entrelazan después de que ocurre un horrible asesinato en un bote angosto amarrado en el canal. Hawkins enfatiza el estado emocional de los protagonistas y sus pensamientos más íntimos que se expresan vívidamente en la página. Ella también imparte sus historias de fondo de manera lenta y deliberada, lo que le permite al lector digerir y comprender completamente las relaciones enredadas entre ellos. Como sugiere el título, este es un thriller psicológico de combustión lenta que recompensa al lector paciente y su atractivo radica en la caracterización bien elaborada del autor y la trama principal absorbente.
Daniel Sutherland es asesinado a puñaladas en su propio barco y la principal sospechosa no es otra que Laura, una joven con antecedentes de enfermedad mental y problemas familiares. Se presume que Laura es la última persona que vio a Daniel con vida y también se la ha visto caminando cubierta de sangre el día del asesinato. El comportamiento extraño y desinhibido de Laura empeora las cosas para ella, ya que los detectives que investigan el caso se convencen de que ella es la culpable. La vecina de Daniel, Miriam, es una mujer de mediana edad poco impresionante que guarda un oscuro secreto de su pasado y también del individuo que descubre su cuerpo. Miriam encuentra la llave de Laura en la escena del crimen y se la guarda sin informar a las autoridades. Es evidente que ella tiene un plan, pero el lector se mantiene en la oscuridad con respecto a sus verdaderas intenciones.
Carla Myers es la tía de Daniel, hermana de su madre, Angela, y está devastada al escuchar la noticia de la muerte de su sobrino. Carla y Angela compartieron una relación tensa después de la trágica muerte del hijo de tres años de Carla en la casa de Angela hace quince años. Carla y su esposo, Theo, culparon a Angela por la negligencia que provocó la muerte de su descendencia y ninguno de los dos ha podido perdonarla desde entonces. Angela, que en ese momento estaba luchando contra su alcoholismo, también fue encontrada muerta unas semanas antes del asesinato de Daniel en un accidente doméstico sospechoso. ¿Fue realmente un accidente o hubo un juego sucio involucrado?
Las muertes de Daniel y Angela constituyen los grandes misterios de la novela, pero también hay tramas secundarias que son igualmente desconcertantes y apasionantes. A medida que se desarrolla la historia, el lector tiene tiempo para especular sobre el posible culpable, aunque cada vez tenemos que ajustar nuestras teorías de acuerdo con los nuevos estándares impuestos por la nueva información y -muchos- giros argumentales. A diferencia de La chica del tren, esta vez la narración es lineal con algunos fragmentos intercalados donde leemos fragmentos de la popular novela policíaca de Theo, titulada "La que se escapó". La importancia de esas partes se vuelve obvia solo en las páginas finales de la novela.
En general, encontré A Slow Fire Burning fácil de leer y muy entretenida, aunque, en el lado negativo, esperaba algo más del final. Sin embargo, es un libro que con toda probabilidad será elegido para ser adaptado a otra película ya que tiene un toque cinematográfico que tiene que ver principalmente con los personajes bien realizados y el ritmo acelerado en el que se desarrolla. En lo personal, me gustó más La chica del tren, quizás por mi preferencia en estilos narrativos no convencionales. De todos modos, es una lectura agradable y no te arrepentirás de comprarla. Sin duda, mantendré los ojos abiertos para futuros lanzamientos de Paula Hawkins, ya que es una atrevida escritora de crímenes que posee un conocimiento profundo de la psicología femenina.
Autora: Paula Hawkins
Puntuación: (★★★/★★★★★)
Sinopsis:
El descubrimiento del cuerpo de un joven asesinado brutalmente en una casa flotante de Londres desencadena sospechas sobre tres mujeres.Laura es la chica conflictiva que quedó con la víctima la noche en que murió; Carla, aún de luto por la muerte de un familiar, es la tía del joven; y Miriam es la indiscreta vecina que oculta información sobre el caso a la policía.
Tres mujeres que no se conocen, pero que tienen distintas conexiones con la víctima. Tres mujeres que, por diferentes razones, viven con resentimiento y que, consciente o inconscientemente, esperan el momento de reparar el daño que se les ha hecho.
Reseña:
Daniel Sutherland es asesinado a puñaladas en su propio barco y la principal sospechosa no es otra que Laura, una joven con antecedentes de enfermedad mental y problemas familiares. Se presume que Laura es la última persona que vio a Daniel con vida y también se la ha visto caminando cubierta de sangre el día del asesinato. El comportamiento extraño y desinhibido de Laura empeora las cosas para ella, ya que los detectives que investigan el caso se convencen de que ella es la culpable. La vecina de Daniel, Miriam, es una mujer de mediana edad poco impresionante que guarda un oscuro secreto de su pasado y también del individuo que descubre su cuerpo. Miriam encuentra la llave de Laura en la escena del crimen y se la guarda sin informar a las autoridades. Es evidente que ella tiene un plan, pero el lector se mantiene en la oscuridad con respecto a sus verdaderas intenciones.
Carla Myers es la tía de Daniel, hermana de su madre, Angela, y está devastada al escuchar la noticia de la muerte de su sobrino. Carla y Angela compartieron una relación tensa después de la trágica muerte del hijo de tres años de Carla en la casa de Angela hace quince años. Carla y su esposo, Theo, culparon a Angela por la negligencia que provocó la muerte de su descendencia y ninguno de los dos ha podido perdonarla desde entonces. Angela, que en ese momento estaba luchando contra su alcoholismo, también fue encontrada muerta unas semanas antes del asesinato de Daniel en un accidente doméstico sospechoso. ¿Fue realmente un accidente o hubo un juego sucio involucrado?
Las muertes de Daniel y Angela constituyen los grandes misterios de la novela, pero también hay tramas secundarias que son igualmente desconcertantes y apasionantes. A medida que se desarrolla la historia, el lector tiene tiempo para especular sobre el posible culpable, aunque cada vez tenemos que ajustar nuestras teorías de acuerdo con los nuevos estándares impuestos por la nueva información y -muchos- giros argumentales. A diferencia de La chica del tren, esta vez la narración es lineal con algunos fragmentos intercalados donde leemos fragmentos de la popular novela policíaca de Theo, titulada "La que se escapó". La importancia de esas partes se vuelve obvia solo en las páginas finales de la novela.
En general, encontré A Slow Fire Burning fácil de leer y muy entretenida, aunque, en el lado negativo, esperaba algo más del final. Sin embargo, es un libro que con toda probabilidad será elegido para ser adaptado a otra película ya que tiene un toque cinematográfico que tiene que ver principalmente con los personajes bien realizados y el ritmo acelerado en el que se desarrolla. En lo personal, me gustó más La chica del tren, quizás por mi preferencia en estilos narrativos no convencionales. De todos modos, es una lectura agradable y no te arrepentirás de comprarla. Sin duda, mantendré los ojos abiertos para futuros lanzamientos de Paula Hawkins, ya que es una atrevida escritora de crímenes que posee un conocimiento profundo de la psicología femenina.
Gracias por leer.